Sala Cielo

Fecha: 2017-2019
Emplazamiento: Montevideo, Uruguay
Obra/m2: Ampliación, 70m2.
Proyecto: Mariana García Etcheverry, Elisa Porley Lluviera, Catalina Radi Mujica
Cliente: Marcos Ramírez, Gastón Musetti - Casa Almargen
Estructura: Ing. Jorge Bliman
Constructora: Plus Construcciones
Dirección de obra: Adriana de Amorim
Fotografía: Marina Fernández Espino
Video: Marina Fernández Espino, Patricia Iccardi Amen


Sala Cielo es una sala de danza, es la ampliación de una casa Patio construida en 1910 en el barrio Cordón.
El proyecto consiste en una intervención arquitectónica puntual: la creación de una sala para un bailarín "sobre" la casa existente, una casa que funcionaba originalmente como vivienda y espacio de trabajo: Casa Almargen.
Esta sala está destinada a las creaciones del artista, ensayos y pequeñas prácticas grupales y la intención fue crear un espacio que dé lugar a estas dinámicas.

Se configura en un único volumen de aire que contempla y refleja el paso del día.
Una arquitectura inmersiva, de carácter cálido, íntimo y simple, guía la búsqueda.
Una interioridad envolvente, una arquitectura que nos libere de nuestra intensa compulsión a concentrar, analizar, enmarcar, categorizar y aislar (1).
Las claves materiales son el uso de la madera interior, la luz natural y una acústica cuidada.
El proyecto busca generar una atmósfera de calma, un espacio en reposo, un cuerpo común. Un lugar donde expandir el tiempo, un refugio de madera, aire y luz.

Las prácticas requerían de al menos un sector de gran altura que alcanza los 5 metros, y un piso de madera especialmente diseñado para la danza contemporánea.
Un presupuesto limitado determinó la búsqueda de soluciones constructivas específicas, que dieron respuesta a las intenciones planteadas. Éste volumen interior está contenido lateralmente por muros de bloque de hormigón relleno, revestidos al interior por una piel de abeto que termina de conformar los cerramientos y el pavimento de la sala en su totalidad. El espacio se abre con ventanales hacia al este, a la copa de un plátano junto a una pequeña terraza y hacia al oeste a las azoteas de la ciudad compacta. El interior amplio se encuentra bajo un techo liviano de vigas de madera y paneles de pino.
Un revestimiento de chapa ondulada gris envuelve todo el volumen hacia el exterior, de manera continua, paredes y cubierta, estableciendo un contenedor que dialoga mediante su neutralidad con la construcción preexistente, con el contexto inmediato del barrio y con la ciudad consolidada.

El cuerpo se termina de comprender en el espacio, el espacio se termina de comprender en el cuerpo.

1. Extraído: Toop D. Océano de Sonido, palabras en el éter, música ambient y mundos imaginarios. Caja Negra, 2016, Buenos Aires, Argentina. *El término música se ha sustituido por el término arquitectura.